y busca cada segundo hilos, millones de hilos que ataban los recuerdos, lo que nos unía y ahora nos separa
busco en cada mota de polvo que queda en las sabana que cubren tus recuerdos en las habitaciones vacías y de puertas cerradas que es mi cabeza.
La parte de mi mente que solo te pertenece a ti.

Pero esa parte, aunque cubierta, abandonada que no puedo mostrarle a él ni a nadie que no seas tú, esa puta puerta cerrada, sigue ahí.